La verdad, no sé muy bien cómo, pasé de ser un músico de rock, a fundar con mi hermano dos empresas de consultoría con contratos por encima de 200 millones de dólares.

Hasta aquí parece que de puta madre, ¿verdad? Pues no.

La razón por la que jamás he querido trabajar para nadie, no se estaba cumpliendo. 

Me sentía engullido por la burocracia de los proyectos, cansado de reuniones, de trabajo de oficina y sobre todo de tratar con colaboradores, proveedores y clientes que me hacían sentir como si fuera un extraterrestre. 

Siempre supe que en el mundo online estaban las respuestas que buscaba para tener un negocio que me permitiera tener la libertad que deseaba tener.

Entonces, ¿qué hice? Lo que hago siempre, formarme con quienes ya estaban haciendo lo que yo quería hacer.

En menos de 9 meses invertí cerca de 25K USD en aprender de los mayores referentes del marketing y las ventas online. (Si esto te parece mucho, como te diga lo que llevo invertido hasta hoy, te caes de culo.)

Pero bueno, en fin, que comencé a aplicar lo que iba aprendiendo y poco a poco los resultados iban llegando en forma de ventas esporádicas que me suponían un extra, aunque mis mayores fuentes de ingresos seguían viniendo de mis negocios tradicionales.

Pero todo cambió el 19 de marzo de 2020. Seguro que ya te imaginas porqué.

Pandemia. ¡Todos a su puta casa hasta nueva orden!

De golpe, mis fuentes de ingresos se pararon; pero mis deudas, que eran enormes (ya sabes por qué si has visto alguna de mis presentaciones…), los gastos de las empresas y mis propios gastos familiares, esos no pararon. 

En ese punto se metieron los huevos dentro del cuerpo, y perdona la expresión. 

Estaba completamente arruinado, confinado en casa, a 8000km de mi familia, sin ingresos, con un niño de menos de un año y con una única ventana al mundo por la cual generar algo de dinero para mantener a mi familia. Mi computadora.

El mundo online era mi única salida. Ese fue mi punto de inflexión.

Así que me encerré día y noche a diseñar una estrategia que me permitiera convertir esas ventas esporádicas que ya realizaba, en algo recurrente, predecible y escalable. El resto es historia.

Fue así como diseñé una metodología que permite a personas comunes, con habilidades extraordinarias, cimentar, construir y hacer crecer un negocio online sólido. Y no te hablo de vender en internet, eso lo hace cualquiera. Te hablo de un NEGOCIO, en mayúsculas, cimentado sobre productos High Ticket.

Y desde entonces, ayudo a ese tipo de personas acompañándoles en el camino desde diferentes ángulos, con diferentes programas, pero con una misma visión. Que logren sentirse realizados, seguros y libres para tomar cualquier tipo de decisión en su vida sin que ésta venga condicionada por su situación económica o laboral.

A lo mejor tú puedes ser una de esas personas, o no.

En todo caso, el primer paso para saberlo es comprando mi libro y poniendo en práctica la sencilla estrategia que planteo para así salir de dudas.